Observando detenidamente las proyecciones demográficas del Instituto Nacional de Estadísticas de Chile, impacta la perspectiva de que hacia el año 2050, aproximadamente un tercio de nuestra población estará compuesto por adultos mayores. Este dato, lejos de ser meramente estadístico, encierra una serie de desafíos y oportunidades que como sociedad debemos abordar con seriedad y compromiso.
La realidad demográfica que se vislumbra nos insta a reflexionar sobre la importancia de adaptarnos proactivamente a este cambio y de crear espacios inclusivos que no solo acojan, sino que también enriquezcan las vidas de los mayores.
Es imperativo comprender que la vejez no debe ser sinónimo de marginación o abandono, sino una etapa de la vida igualmente valiosa y digna de ser plenamente vivida.
Desde nuestra experiencia, hemos aprendido que la innovación y la anticipación son fundamentales para abordar las necesidades cambiantes de nuestra sociedad.
Debemos adoptar una mentalidad proactiva, buscando constantemente nuevas formas de mejorar la calidad de vida de las personas mayores, adaptando nuestros servicios, infraestructuras y políticas públicas para satisfacer sus necesidades y aspiraciones.
Es responsabilidad de todos trabajar activamente para garantizar su bienestar y promover su inclusión social y económica. Crear un entorno donde todos, independientemente de su edad, se sientan valorados, respetados y parte activa de la comunidad es un compromiso moral y social que todos debemos asumir. Esto implica no solo eliminar barreras físicas y sociales, sino también promover una cultura de respeto y aprecio hacia la diversidad generacional.
En este sentido, es crucial fomentar el diálogo intergeneracional y promover la colaboración y el intercambio de conocimientos y experiencias entre diferentes grupos de edad.
La convivencia y el enriquecimiento mutuo entre jóvenes y mayores no solo fortalecen el tejido social, sino que también contribuyen a construir una sociedad más inclusiva, equitativa y cohesionada.
Es importante que las empresas en Chile se comprometan y comiencen a reunir esfuerzos para colaborar en la creación de un futuro más inclusivo y equitativo para todas las generaciones.
Creemos profundamente en construir una sociedad en donde los adultos mayores se sientan valorados, cuidados y sean considerados como una parte integral de la población, construyendo entre todos un futuro más inclusivo y equitativo para todas las generaciones.
Columna de opinión extraída de la revista Mundo Mayor de El Mercurio, edición N°27 lunes 22 de abril de 2024